domingo, 3 de junio de 2012
Discurso de Dña. María Helizo en el acto de graduación de Bachillerato.
ENTRADA ACTUALIZADA CON EL VÍDEO
María Helizo
Buenas noches a todos. Por fin llegó
este día tan esperado, sobre todo, por vosotros, queridos alumnos. Hoy es
vuestro día, hoy vosotros sois los protagonistas. Y yo, en nombre de todos los
que han sido vuestros profesores en este Instituto, quiero felicitaros por
haber alcanzado esta meta que os habíais propuesto.
A partir de ahora comienza otra
importante etapa en vuestras vidas. En ella, comenzaréis a vivir ya de una
forma más independiente, conoceréis otros lugares, a otras personas y, sobre
todo, os formaréis para ser aquello que hayáis decidido ser.
En definitiva, dejáis atrás, supongo
que con cierta pena, vuestras vivencias durante estos años en el Instituto. Pero
no os pongáis demasiado nostálgicos porque ahora comienza una etapa, si cabe,
más intensa que la que acabáis de culminar.
Para terminar siendo ese tipo de
profesional que queréis ser, os diré que ya tenéis un punto a vuestro favor y
es que todos sois buenas personas y eso, recordadlo siempre, es muy importante.
Una sociedad funciona bien y progresa cuando sus ciudadanos son honestos y
buenos trabajadores. Y deja de funcionar o tiene problemas cuando lo que impera
en ella es el fraude y el engaño.
Así que seguid siendo así. Pero no
basta con ser buenas personas, además debéis cultivar vuestra capacidad de
sacrificio y de superación. Nadie os va a regalar nada, pero es que además todo
lo que uno consigue por sí mismo proporciona una satisfacción inigualable.
Además, debéis tener siempre como referente a vuestros padres y a vuestros
abuelos; ellos, la gente de nuestra tierra han sido y son gente muy
trabajadora. Sentíos orgullosos de ellos y devolvedle con vuestro trabajo y
vuestros éxitos, todo lo que ellos han dado por vosotros.
Actualmente, no sé si os habéis
enterado, estamos en crisis, la prima de riesgo está fatal, la palabra recorte
se ha puesto de moda, la palabra Merkel también se ha puesto de moda, en fin,
vivimos un momento complicado y en el que ser optimista no resulta fácil. Pero
por difíciles que estén las cosas, no os dejéis llevar nunca por el pesimismo;
pensad que a pesar de las dificultades, siempre hay soluciones y que estas se
encuentran más fácilmente cuando uno las busca desde una actitud optimista.
Y termino ya animándoos a que
estudiéis, trabajéis y os esforcéis siempre para conseguir todo aquello que os
propongáis. Y todo ello sin olvidar nunca que tenéis que vivir vuestra vida con
una finalidad que está por encima de todo: SER FELICES.
Buenas noches y mucha suerte.
María Helizo
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